Hay ciertas deudas que no puedes eliminar con la Ley de la Segunda Oportunidad. Estas son:

• Deudas por daños personales o muerte como consecuencia de un accidente: Esto significa que si has causado algún daño a alguien o incluso si ha habido una fatalidad a causa de un accidente, las deudas relacionadas con las compensaciones por estos eventos no pueden ser eliminadas.

• Indemnizaciones por accidentes laborales o enfermedades profesionales: Si eres un empresario y tienes deudas relacionadas con accidentes o enfermedades de tus empleados en el trabajo, estas deudas no pueden ser eliminadas.

• Deudas de alimentos: Esto incluye el pago de pensiones alimenticias para hijos o familiares, que son obligaciones legales y no pueden ser exoneradas.

• Deudas por salarios (con límites): Las deudas de los últimos 60 días de trabajo o durante el procedimiento de concurso, hasta cierto límite, no pueden ser eliminadas.

• Deudas con Hacienda y la Seguridad Social (con límites): Aunque algunas deudas con estas entidades pueden ser eliminadas hasta cierto importe, existen límites y restricciones.

• Multas penales o administrativas graves: No puedes eliminar las deudas por multas en casos de infracciones penales o sanciones administrativas graves.

• Costes judiciales y gastos legales: Los gastos relacionados con el proceso legal para obtener la exoneración de deudas no pueden ser eliminados.

• Deudas con garantía real: Las deudas respaldadas por una garantía real, como una hipoteca, no pueden ser eliminadas. Sin embargo, si la propiedad se vende y queda una deuda remanente, esta sí podría ser eliminada.

• Bienes declarados por el juez para proteger a los acreedores: El juez puede determinar que ciertos bienes no sean exonerables para proteger a los acreedores y evitar la insolvencia.

Recuerda que la Ley de la Segunda Oportunidad puede ser útil para muchas personas con deudas importantes, pero existen ciertas limitaciones sobre qué deudas pueden ser eliminadas.